El ransomware es un tipo de software malicioso (malware) que cifra los archivos en el sistema de un usuario y luego demanda un pago (un rescate) para proporcionar la clave de descifrado y restaurar el acceso a los archivos. Este tipo de ataque se lleva a cabo con el objetivo de extorsionar dinero de la víctima.
Los ransomware suelen propagarse a través de correos electrónicos maliciosos, sitios web comprometidos o mediante la explotación de vulnerabilidades en el sistema. Una vez que el ransomware infecta un sistema, cifra archivos clave y muestra una notificación en la que se solicita el pago del rescate, a menudo en criptomonedas para dificultar el rastreo.
Es importante destacar que, aunque algunas víctimas pueden optar por pagar el rescate para recuperar sus archivos, no se recomienda, ya que no hay garantía de que los atacantes cumplan su promesa y, además, pagar puede perpetuar este tipo de actividades delictivas. En cambio, se aconseja tomar medidas preventivas, como mantener el software actualizado, realizar copias de seguridad periódicas y tener un software antivirus eficaz para reducir el riesgo de infección por ransomware.
